Seamos

Sonrientes todos vamos por lo mismo, sin saber adonde vamos. Qué más da quién lo sabe, quién lo supo. Marchemos al compás de no saber nada o de saberlo todo, de la mediocridad o de la perfección. De alguna forma llegaremos. ¿Llegaremos y habrá que seguir la marcha?. Preguntan algunos. Silencios inundan la caminata.
¿Y llegar por qué, para qué?
Somos iguales. Estamos hechos de madera. Pintados con los mismos tonos. Algunos con más pintura, más defectos, pintados con mejor mano.
Somos un equipo. Somos un ejército. Somos los que somos. Sigamos cantando esta canción que nos lleva al final, a lo más alto, a la cúlmine, a donde todo no es nada, a donde estemos juntos, a donde pertenecemos.
Y seamos siempre. Siempre.