miércoles, enero 18, 2006

¿....U2?

La espera terminaba. Se ponían finalmente a la venta las entradas, frente a polémicas por los elevados precios. Excusas iban y venían, pero a quién le importa, es U2. Temprano ese día me levante a la busca de unos tickets que esperaba hace 8 años arrepentida por no haber hecho lo posible por ir a verlos. Ahora era el día. Mi destino más cercano era el centro, pero desistí luego de una llamada confesandome que ya se agolpaban más de 200 personas haciendo cola desde las 8 de la mañana. Eran las 10. Pensé que lo más obvio era el florida center. Fui esperanzada que estuviera vacío, como siempre. Llegué y en la entrada de Ripley del tercer piso no había nadie, sonreí y me puse a vitrinear, haciendo hora, sin fijarme en el primer piso, cosa que hice después de media hora perdida mirando peluches y artículos de cumpleaños, advertida por un guardia que yo creo que me vio con cara de satisfacción sin fundamento. Baje corriendo y espere detrás de 200 personas. Gente seguía llegando, todos ansiosos esperando que esas puertas de una vez por todas abrieran. Detrás de mí, había un tipo que estaba escuchando música de U2, soñando ya en el concierto con Bono entonando Gloria. ¿No será muchho?, pensé. Mientras tanto, no quedaba otra que empezar a socializar, a que parte vas, con quién vas, etc. Abrieron las puertas y entraron no más de 100 personas. Una sóla caja había para 500 personas. Pasó media hora y sólo habián atendido a 10 personas. De acá a las 7 de la tarde para tener esas entradas en mi mano. En eso, conversando y aquejados ya por la demora, tipos de la fila desaparecián e iban a la tienda y salían con la sonrisa de oreja a oreja. Que patúa la gente, le comentaba al lolo que estaba delante mío, así no se puede, no repetan a la gente y puros comentarios de la mala educación y como se pasaba a llevar salían ofuscados de mi boca. Le dije que iba a echar un vistazo de lo que estaba pasando adentro. Me encontré con otro tipo que estaba cerca mío y que trataba de colarse. Me dijo, dale colate. Yo, con la tentación de comprarlas ahora y de no esperar 5 horas quizás para que me dijeran que no quedaban, fui débil. Falsa. Vi a un tipo que estaba a 3 personas de comprar las entradas y le dije : ehhhh..oye cuántas entradas vas a comprar? dos me respondio con cara de que te quieres colar....yo voy y le digo me puedes comprar 2 por favor? ..ultra piola para que no se percatara el de atrás. Asintió con la cabeza. Y así llegue al momento esperado. Frente a la cajera, con la ansiedad y con gente agolpada, pifiando, desesperada ya detrás mío. Las tuve por fin en mi mano, las guarde rápido y salí como criminal, rápido, sin que nadie de los que estaba conmigo en la fila me viera. Me sentí mejor cuando vi a todos los que estaban conmigo en la fila adelante, asiendose los lesos, todos caímos en lo mismo.



PD: Último de rasca encontré que Dario Paya esté regalando entradas a U2. Lo único que faltaba.